¿Quien hizo fluir el agua en los ríos, o mares? Sólo el mismo rió o el mismo mar podría explicárnoslo, no la manera sino la decisión de que fuera así.

Así pasa en la vida. Buscamos el porqué de muchas cosas, cosas que no comprendemos desde nuestro punto de vista. Preguntamos o nos preguntan el porqué de la actuación de alguien. Nos damos explicaciones continuamente a nosotros mismos y entre nosotros.  No podemos comprender porqué actúan los demas de una u otra manera.  De repente en un solo segundo te das cuenta que lo único que depende de Ti es el respeto. Respeto por lo que el otro decide, respeto a su espacio, a sus necesidades, a sus pensamientos, a su manera de Amar o de hacer las cosas. 

Cuando buscamos por qués estamos intentando valorar y juzgar a otro porque no actúa como nosotros creemos que debería hacerlo. 

Si es en el trabajo igual llega un día enfadado, y él no quiere decir porqué, entonces preguntas a otros.  Uno te dice, ha tenido un mal día en casa, otro te dirá que Pepe está así porque   no tiene dinero. otro dirá que su madre se ha puesto enferma. Al final acabarás más desorientado.

Si es una relación que se acaba, unos te llamarán para saber, y te dirán que te echaron toda la culpa de todo. O que sigue buscando a su ex mujer y ese es el motivo que nunca funcionaráis, que siempre ella estuvo  ahí. Otros te dirán que ya se veía venir, que no te quería de verdad. Tú intentarás dar explicaciones para comprender porqué actuaba así que ellos te lo confirmen. Da igual. Al final acabarás más confundid@ de lo que ya estabas.

Siempre preguntamos a las personas equivocadas y a veces la misma persona,  tampoco querrá decirte los motivos por los que está así. 

Un día de repente te despiertas y piensas ¿Qué mas da? Lo único que puedo hacer es respetar y seguir amando y actuando de la misma manera que siempre porque al fin y al cabo la verdad y las soluciones están dentro de cada uno. 

Un día te despiertas en un solo segundo y descubres que el Amor verdadero es el respeto incondicional al otro y a Ti mismo.

Un día te despiertas y de repente aunque todos dicen que esa persona no cambiará Tú le das ese espacio de duda, porque todos podemos cambiar si queremos algo mejor, pero no depende tampoco de ti, así que en tu mente lo imaginas feliz, amoroso, armonioso, lleno de vida, de valores, y ves todo el potencial que hay dentro de esa persona y visualizas que en un instante o en cien años eso será así. el tiempo tampoco depende de Ti, siempre es del otro. No es tu tiempo es el suyo.

Un día te despiertas y decides vivir el presente, hoy mismo. reconoces tus maneras de actuar que no te han gustado, reconoces todo aquello que te gustaría cambiar y pones en marcha desde aquí y ahora, aquello que acabas de descubrir en ti y que ya has instalado en la nueva programación para cambiarlo.

Un día te despiertas y viviendo desde aquí y ahora sabes que la vida si has de volver a encontrarte con esas personas te las pondrá delante, y que si ha de salir bien saldrá porque hoy ya nadie es el mismo que ayer. En este preciso instante ya no soy el de hace diez minutos. Y dentro de un segundo ya no seré exactamente el mismo que soy ahora. Así que confía. La vida empieza ahora. Solamente hemos de Amar con respeto.

Lo que tenga que ser siempre será.

FC